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La paciencia del alcalde Aquiles Álvarez parece haber llegado a su límite. En una publicación que está explotando las redes sociales, el alcalde de Guayaquil ha lanzado un ataque frontal sin precedentes contra el Gobernador de Guayas, desatando una tormenta política que promete no calmarse pronto. Con un lenguaje que va directo al grano, Álvarez no solo criticó, sino que humilló públicamente al funcionario.
«Un peón sin carácter» y «vasallo» al servicio de un poder ciego y sordo». Así, sin filtros, describió el alcalde a su homólogo provincial. La publicación, que se ha vuelto un fenómeno viral en cuestión de horas, deja claro que la relación entre la Alcaldía y la Gobernación está completamente rota. Álvarez acusa al gobernador de defender «lo indefendible» y de encubrir el desastre de su gobierno, mientras la provincia se cae a pedazos.
La crítica no se quedó en insultos. El alcalde enumeró una serie de problemas que, según él, el gobernador ignora por completo:
Niños fallecidos sin una explicación clara.
Hospitales colapsados y médicos sin insumos.
Madres que lloran a sus hijos recién nacidos.
Una ola de delincuencia imparable.
Mientras todo esto sucede, la prioridad del gobernador, según Álvarez, es «buscar pleito conmigo».
«Guayaquil seguirá luchando sola», fue la contundente frase con la que el alcalde zanjó la discusión, calificando al gobernador como otro «funcionario decorativo» que solo «ocupa silla y cobra sueldo sin mover un dedo». El mensaje es claro: la ciudad no puede esperar nada del gobierno provincial y tendrá que valerse por sí misma.
El remate fue brutal: «Qué vergüenza que el Guayas tenga un gobernador de su nivel.» Esta publicación no es solo una crítica; es una declaración de guerra política que ha polarizado a la ciudadanía. Las redes sociales están que arden. ¿Habrá respuesta? ¿O el silencio del gobernador confirmará las acusaciones de Aquiles Álvarez?
