El reciente viaje del presidente Daniel Noboa a Estados Unidos, que se extendió a cinco días a pesar de que inicialmente fue anunciado como una gira de tres, sigue envuelto en el misterio.
La Canciller Gabriela Sommerfeld fue interpelada sobre la falta de transparencia en torno a la agenda oficial y el retraso en la publicación de los detalles del desplazamiento.
La funcionaria se limitó a señalar que el objetivo principal fue “reforzar los acuerdos que tenemos con Estados Unidos y la agenda enmarcada en temas de seguridad y comercio”. Sin embargo, la Canciller enfatizó que la entidad que dirige “no maneja las figuras de declarar una agenda secreta o reservada”, eludiendo la responsabilidad de transparentar las actividades del mandatario ante la opinión pública.
Silencio sobre el Conflicto en Frontera
Sommerfeld también optó por guardar silencio sobre otros temas sensibles, como el enfrentamiento armado entre militares colombianos y una columna del ELN, registrado cerca de la frontera con Ecuador. La Canciller indicó que por el momento “no existe información adicional” y que corresponde al Bloque de Seguridad emitir cualquier pronunciamiento oficial, desviando nuevamente la atención de la Cancillería en temas de relevancia binacional.
La falta de claridad sobre la agenda presidencial alimenta las críticas sobre la opacidad en la gestión de asuntos exteriores y la necesidad de una rendición de cuentas inmediata sobre los compromisos adquiridos durante la gira en EE. UU.