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Los habitantes del barrio Nambija Bajo han elevado un urgente llamado a la empresa privada y a las diversas instancias de gobierno —locales, provinciales y nacionales— para que se intensifique el apoyo logístico, particularmente con el envío de más volquetes. El objetivo es claro y apremiante: concluir la construcción del muro de protección a lo largo de las orillas del río Zamora.
La preocupación en Nambija Bajo es palpable. Tras las intensas lluvias de los últimos días, el río Zamora se desbordó, provocando la inundación de zonas pobladas y generando alarma entre las familias. El muro en construcción representa la única barrera efectiva para salvaguardar viviendas, caminos y servicios esenciales ante futuras crecidas.
Aunque la comunidad reconoce la ayuda inicial recibida, enfatizan que esta ha sido insuficiente para completar la obra en el tiempo requerido. La continuidad de las lluvias mantiene viva la amenaza de un nuevo desbordamiento, lo que añade una capa de urgencia a su petición.
«Pedimos más volquetes para poder avanzar rápido con el muro. Solo así podremos dormir tranquilos y proteger a nuestras familias», manifestó uno de los vecinos afectados, reflejando el sentir generalizado.
La comunidad de Nambija Bajo espera una respuesta expedita a su llamado, con la esperanza de que el apoyo necesario llegue antes de que una nueva crecida del río Zamora cause daños irreparables en el sector.
